Catholic.net
Fuente: C-Fam
Autor: Aracely Ornelas
El proveedor de aborto más grande del mundo, la Federación Internacional de Planificación Familiar (IPPF), ha reconocido recientemente el alarmante aumento en las muertes maternas en Sudáfrica, desafiando el argumento pro-aborto que el liberalizar las leyes en materia de aborto disminuye la mortalidad materna. La mortalidad materna aumentó en veinte por ciento en el período 2005-2007 en Sudáfrica, un país que desde 1996 ha tenido una de las leyes en materia de aborto más permisivas del continente africano.
Mientras que la mayor parte de las muertes maternas en Sudáfrica son atribuibles al VIH / SIDA , la Federación reconoce que una parte de las muertes son "debidas a complicaciones del aborto" en un país donde el procedimiento es legal y es ampliamente disponible para la población.
Los países en desarrollo han sido presionado en los últimos años por diversos organismos de las Naciones Unidas y organizaciones de la sociedad civil a favor del aborto, incluidos la IPPF, para despenalizar el aborto como medida para reducir las tasas de mortalidad materna. Sin embargo, el último descubrimiento de la IPPF es el más reciente hecho de un número creciente de pruebas que demuestran la opuesta relación entre el aborto legal y alta mortalidad materna.
La nación africana con la menor tasa de mortalidad materna es la República de Mauricio, de acuerdo con un informe del 2009 de la Organización Mundial de la Salud (OMS). La legislación en Mauricio se encuentra entre las legislaciones del continente que más protege a los no nacidos. En el informe también se muestra como los países que han despenalizado el aborto en los últimos años en respuesta a la presión, tales como Etiopía, no han logrado reducir las dramáticas tasas de mortalidad materna. La tasa de mortalidad materna de Etiopía es 48 veces superior a la de Mauricio.
Según la OMS, el país con menor tasa de mortalidad materna en América del Sur es Chile, que protege la vida de los no nacidos en su constitución. El país con la mayor tasa es Guyana, con una tasa de mortalidad materna 30 veces mayor que la de Chile. Guyana ha permitido el aborto casi sin restricción alguna desde 1995. Irónicamente, una de las dos principales justificaciones utilizadas en la liberalización de la legislación de Guyana es acelerar el "logro de la maternidad sin riesgo" por la eliminación de las muertes y las complicaciones asociadas con el aborto inseguro.
Nicaragua ha estado en el punto de mira de los lobbies internacionales pro-aborto desde que modificó su ley hace tres años para asegurar la plena protección de la vida prenatal. Una de las consecuencias fue que Suecia informó de una reducción de más de $ 20 millones en ayuda extranjera. Más recientemente, Amnistía Internacional publicó un informe alegando el aumento de las tasas de mortalidad materna en Nicaragua después de entrar en vigor la ley. Medios de comunicación críticos, sin embargo, han impugnado la veracidad de las reclamaciones de Amnistía y las estadísticas del gobierno de Nicaragua muestran una disminución de la mortalidad materna desde 2006.
Del mismo modo, estadísticas de la OMS para la región de Asia Suroriental muestran que Nepal, donde no hay ninguna restricción sobre el procedimiento, es la región que tiene la tasa de mortalidad materna más alta. La más baja de la región es la de Sri Lanka, con una tasa catorce veces menor que la de Nepal. Según la firma de abogados pro-aborto Centro de Derechos Reproductivos, Sri Lanka tiene una de las más restrictiva leyes sobre el aborto en el mundo.
El país con menor tasa de mortalidad materna en todo el mundo es Irlanda, un país que prohíbe el aborto y cuya Constitución protege explícitamente los derechos de los no nacidos.
Traducción por Alejandro Longueira Ramírez y Borja Fernández Trueba
Fuente: C-Fam
Autor: Aracely Ornelas
El proveedor de aborto más grande del mundo, la Federación Internacional de Planificación Familiar (IPPF), ha reconocido recientemente el alarmante aumento en las muertes maternas en Sudáfrica, desafiando el argumento pro-aborto que el liberalizar las leyes en materia de aborto disminuye la mortalidad materna. La mortalidad materna aumentó en veinte por ciento en el período 2005-2007 en Sudáfrica, un país que desde 1996 ha tenido una de las leyes en materia de aborto más permisivas del continente africano.
Mientras que la mayor parte de las muertes maternas en Sudáfrica son atribuibles al VIH / SIDA , la Federación reconoce que una parte de las muertes son "debidas a complicaciones del aborto" en un país donde el procedimiento es legal y es ampliamente disponible para la población.
Los países en desarrollo han sido presionado en los últimos años por diversos organismos de las Naciones Unidas y organizaciones de la sociedad civil a favor del aborto, incluidos la IPPF, para despenalizar el aborto como medida para reducir las tasas de mortalidad materna. Sin embargo, el último descubrimiento de la IPPF es el más reciente hecho de un número creciente de pruebas que demuestran la opuesta relación entre el aborto legal y alta mortalidad materna.
La nación africana con la menor tasa de mortalidad materna es la República de Mauricio, de acuerdo con un informe del 2009 de la Organización Mundial de la Salud (OMS). La legislación en Mauricio se encuentra entre las legislaciones del continente que más protege a los no nacidos. En el informe también se muestra como los países que han despenalizado el aborto en los últimos años en respuesta a la presión, tales como Etiopía, no han logrado reducir las dramáticas tasas de mortalidad materna. La tasa de mortalidad materna de Etiopía es 48 veces superior a la de Mauricio.
Según la OMS, el país con menor tasa de mortalidad materna en América del Sur es Chile, que protege la vida de los no nacidos en su constitución. El país con la mayor tasa es Guyana, con una tasa de mortalidad materna 30 veces mayor que la de Chile. Guyana ha permitido el aborto casi sin restricción alguna desde 1995. Irónicamente, una de las dos principales justificaciones utilizadas en la liberalización de la legislación de Guyana es acelerar el "logro de la maternidad sin riesgo" por la eliminación de las muertes y las complicaciones asociadas con el aborto inseguro.
Nicaragua ha estado en el punto de mira de los lobbies internacionales pro-aborto desde que modificó su ley hace tres años para asegurar la plena protección de la vida prenatal. Una de las consecuencias fue que Suecia informó de una reducción de más de $ 20 millones en ayuda extranjera. Más recientemente, Amnistía Internacional publicó un informe alegando el aumento de las tasas de mortalidad materna en Nicaragua después de entrar en vigor la ley. Medios de comunicación críticos, sin embargo, han impugnado la veracidad de las reclamaciones de Amnistía y las estadísticas del gobierno de Nicaragua muestran una disminución de la mortalidad materna desde 2006.
Del mismo modo, estadísticas de la OMS para la región de Asia Suroriental muestran que Nepal, donde no hay ninguna restricción sobre el procedimiento, es la región que tiene la tasa de mortalidad materna más alta. La más baja de la región es la de Sri Lanka, con una tasa catorce veces menor que la de Nepal. Según la firma de abogados pro-aborto Centro de Derechos Reproductivos, Sri Lanka tiene una de las más restrictiva leyes sobre el aborto en el mundo.
El país con menor tasa de mortalidad materna en todo el mundo es Irlanda, un país que prohíbe el aborto y cuya Constitución protege explícitamente los derechos de los no nacidos.
Traducción por Alejandro Longueira Ramírez y Borja Fernández Trueba