O superior interesse de Portugal. A eleição

1. Hoje, ou terá sido ontem?, ficámos a saber, por alguém que se diz católico praticante, que a liberalização do homicídio/aborto, o genocídio de pessoas na sua etapa embrionária, a clonagem, o divórcio sem culpa (unilateral), a perversão sexual de crianças nas escolas e o pseudo-casamento entre pessoas homossexuais são do superior interesse de Portugal. De facto, todas estas determinações/promulgações são da responsabilidade do presidente cujas decisões, segundo o próprio, são feitas sempre nesse sentido.

2. Imaginemos, num exercício de delírio, que Hitler e Estaline tinham nascido no mesmo país, por estes tempos. Astutos conseguiam alcançar o poder alternadamente. O estado e a nação estavam na sua vasta maioria dominada pelos dois partidos que intercaladamente a dividiam entre si.

Adolfo nos seus dez anos de poder tinha exterminado milhões de judeus. José, por seu lado, tinha sido responsável pelo genocídio de milhões de camponeses. Qualquer dos dois atropelara sistematicamente o Direito Natural e a Lei de Deus. Cada um a seu modo. Católicos publicamente conhecidos opinavam subtilezas sobre a ética e a responsabilidade, como se foram coisas diferentes.

Entretanto chegava o tempo das eleições e muitos católicos ditos conservadores apoiavam Hitler, tinha mais jeito para a economia e crescimento, enquanto os denominados progressistas seguiam José porque tinha mais jeito para os sindicatos e para a cultura. Os partidos que os apoiavam tinham, nessa altura, basicamente a mesma posição em relação a umas questões a que algumas pessoas chamavam fracturantes e outros, princípios inegociáveis.

Ah! Havia também um terceiro candidato chamado Pol Pot com uns apoiantes relativamente residuais.

Houve grande indignação porque um alucinado, fundamentalista radical e ortodoxo barbudo, disse: eu não escolho! Eu não voto! Não alinho nisto!, nesta palhaçada criminosa! Não me cumpliciarei! Combaterei de outro modo.[1]

Nuno Serras Pereira

29. 05. 2010

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[1] Qualquer semelhança com a realidade é pura coincidência.

Vatican's sex abuse prosecutor says church must amputate to heal

by John L. Allen Jr - May. 29, 2010

In NCR

When the innocence of children is “trampled upon, broken, sullied, abused, and destroyed,” then “the earth becomes arid and the whole world sad,” the Vatican’s top sexual abuse prosecutor said this morning in Rome.

Monsignor Charles J. Scicluna indirectly critiqued the clerical culture in which abuser priests were routinely given second chances.

Christian friendship, Scicluna said, is “submitted to the law of God,” so if a member of the church is an “occasion of sin,” then a believer “has no other choice … but to cut this tie.”

Weeding out abusers, Scicluna implied, is a form of “divine surgery” intended to save the body by amputating a diseased part.

Scicluna, a Maltese priest who serves as Promoter of Justice in the Congregation for the Doctrine of the Faith, spoke as part of a service of reparation for abuse committed by priests and for healing within the church organized by students at Rome’s pontifical institutions. The service took place this morning in St. Peter’s Basilica, at the Altar of the Chair of Peter.

Scicluna delivered a homily for the service. Widely considered the Vatican’s top expert on the sexual abuse crisis, Scicluna rarely speaks in public – making his comments this morning all the more significant.

Tapped by then-Cardinal Joseph Ratzinger, today Pope Benedict XVI, to handle the canonical response to charges of sexual abse against priests, Scicluna is widely seen as the architect of the more aggressive approach to the crisis which emerged in the Congregation for the Doctrine of the Faith after 2001.

This morning, Scicluna delivered a largely spiritual meditation on the relationship between Jesus and children, saying that “the church, the spouse of Jesus, has always had a special care and solicitude for children and the weak.”

According to the fathers of the church, Scicluna said, a child was “the eloquent icon of innocence.”

In that light, Scicluna argued, destroying the innocence of a child makes the entire earth “arid” and “sad.”

Quoting St. Gregory the Great, Scicluna suggested that such sins are especially heinous when committed by priests.

“After having taken a profession of holiness, anyone who destroys others through words or deed would have been better off if their misdeeds had caused them to die in secular dress, rather than, through their holy office, being imposed as an example for others in their sins. Without doubt, if they had fallen all by themselves, their suffering in Hell would be easier to bear.”

Scicluna contrasted the innocence of children with arrogance and careerism in the church.

“How many sins in the church [have happened] because of arrogance, insatiable ambition, abuse of power and injustices committed by those who abuse their ministry to advance their career?”, Scicluna asked.

He denounced the “futile and wretched motives of vainglory.”

The remedy to such scandals offered by God as the “Divine Surgeon,” according to Scicluna, is to “cut out [disease] in order to heal,” and to “amputate in order to restore health.”

Beyond such drastic measures, Scicluna also proposed the “preventive medicine” of solid formation for future priests, calling on them to be on fire with the faith, making them salt and light for the world.

This morning’s service of reparation included an hour of adoration of the Blessed Sacrament, a period of guided prayer meditation led by Scicluna, and concluded with a solemn benediction. Students who organized the event said they decided to do so “in the wake of the media attention given in recent months to abuses perpetrated by priests. and in response to the Holy Father’s call to penance in his Letter to Ireland.”

El presidente de la CEI advierte contra el “suicidio demográfico” de Italia

ROMA, miércoles 26 de mayo de 2010 (ZENIT.org).- El invierno demográfico y la falta de trabajo, sobre todo de los jóvenes, son los dos problemas más graves que debe afrontar Italia en estos momentos.

Así lo afirmó el cardenal Angelo Bagnasco, arzobispo de Génova y presidente de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI), durante la apertura ayer, en el Vaticano, de la Asamblea Plenaria de los obispos italianos.

El purpurado quiso alertar sobre todo del “lento suicidio demográfico al que Italia se está dirigiendo”.

Más del 50% de las familias italianas actuales no tienen hijos, y entre las que sí tienen, casi la mitad tienen solo uno, el resto dos. Sólo el 5,1 % de las familias tiene tres o más hijos.

“Por esto – subrayó ayer el arzobispo de Génova – es urgente una política que esté orientada a los hijos, que quiera desde ya mismo encargarse de un recambio generacional equilibrado”.

Para salir de la crisis, el cardenal Bagnasco señaló el “cociente familiar” como “innovación que puede liberar el futuro de nuestra sociedad”.

Según el presidente de los obispos italianos, “la familia fundada en ese bien inalterable que es el matrimonio entre un hombre y una mujer, debe ser defendido y continuamente preservado como crisol de energía moral, determinante a la hora de dar perspectivas de vida a nuestro presente”.

Por su parte, los obispos han asumido el compromiso de que “en la pastoral familiar, y en la dirigida a la preparación al matrimonio, se trabaje para arraigar aún más la conciencia de que los hijos son dones que multiplican el crédito hacia la vida y su mañana”.

Trabajo y jóvenes

El presidente de la CEI señaló que el otro punto esencial para que Italia salga de la crisis es el trabajo, que es “el recurso, es más, la cuota mínima de capital que la sociedad proporciona a cada ciudadano, en particular a los jóvenes en búsqueda del primer empleo, para que puedan insertarse y, encontrando sentido en lo que hacen, puedan sentirse útiles como actores de crecimiento y desarrollo”.

La creciente crisis ocupacional, subrayó el purpurado, es “una preocupación que angustia y por la que pedimos un esfuerzo suplementario a toda la clase dirigente del país: políticos, empresarios, banqueros y sindicalistas”.

El arzobispo de Génova invitó por tanto al Gobierno y a las fuerzas sociales a potenciar a las pequeñas y medianas industrias, ponerlas en red también en el plano decisional, cualificar al sector de la investigación y el turístico, potenciar la agricultura y el artesanado, racionalizar la distribución, facilitar el cooperativismo.

“Es necesario, por tanto, reforzar a los sujetos que mejor expresan las cualidades del territorio y más pueden absorber y volver a motivar la creación de empleo”.

Clero y abusos

Otra cuestión central en su intervención fueron los actuales escándalos por abusos sexuales cometidos por miembros del clero, animando a los fieles a “vivir cristianamente este momento de prueba” y, sobre todo, “en los términos de un examen de conciencia”.

El cardenal Bagnasco dio las gracias al Papa que, “como Pedro, se ha puesto delante de nosotros y ha cargado, él el primero, la cruz”.

Afirmó que la implicación de sacerdotes en estos escándalos provoca “amargura, cuando no rabia” en relación “con las esperanzas traicionadas”, y expresó hacia las víctimas “todo nuestro dolor, nuestro profundo remordimiento y la cercanía cordial por haber sufrido semejante pecado grave y crimen odioso”.

El cardenal Bagnasco añadió que la pedofilia es un “pecado aterrador”, y afirmó que el Papa es “intransigente con toda suciedad, propugnando decisiones de transparencia y limpieza. De él a Iglesia ha aprendido y aprende a no tener miedo de la verdad, aun cuando es dolorosa y odiosa, a no callarla o encubrirla”.

Al mismo tiempo, criticó fuertemente la hipocresía de una cierta cultura que justifica y favorece la pornografía y las perversiones, o cubre “inconfesables elecciones de ocio y de turismo”.

“¿Podemos olvidar acaso las alarmantes declaraciones de hermanos obispos del Extremo Oriente respecto al oprobio en el que también hay italianos responsables?” – inquirió –. ¿Podemos acaso no repetir la alarma lanzada por nosotros sobre las multinacionales de la pornografía que están al acecho detrás de la adopción, en sí misma positiva para la televisión, en la TDT?”.

El purpurado añadió que “sin evocar aquí las posturas extremas de quienes en Occidente quisieran incluso dar dignidad política a la práctica pedófila, hay que decir que nos movemos en una contradicción cultural y ética” en esta cuestión.

“Hoy existe una indudable exasperación de la dimensión de la sexualidad, que se distingue por ser machaconamente obsesiva, y que no puede, a la larga, dejar de producir efectos indeseados en las actitudes de las personas, en particular de las psicológicamente más frágiles y expuestas”.

[Por Antonio Gaspari, traducción del italiano por Inma Álvarez]

Grande bronca!

1. No dia 12 de Abril, deste ano, fomos surpreendidos por uma reportagem, com várias entrevistas, sobre “homossexuais praticantes/católicos praticantes” que entre outras coisas revelaram que o Prior da Igreja de Santa Isabel, P. José Manuel Pereira de Almeida, tinha convidado em Setembro de 2003 Domenico Pezzini, sacerdote italiano, cujo livro “As Mãos do Oleiro” (Paulinas, 2009) virá a prefaciar. Logo em Outubro do mesmo ano nasce um grupo, denominado Riacho, inspirado na experiência da comunidade La Fonte, criada pelo padre Pezzini, que se reúne num espaço da Capela do Rato cedida, para o efeito, pelo pároco de Santa Isabel, com o conhecimento e autorização do Senhor Patriarca. Mais adiante, os padres José Manuel Pereira de Almeida e José Tolentino Mendonça, professor de exegese bíblica, afirmam peremptoriamente o acolhimento incondicional[1] da Igreja. As palavras arrependimento, penitência, conversão não aparecem na entrevista.[2]

Alguns números depois, a mesma revista recolhe declarações do Senhor Patriarca de Lisboa. Nela, a certo ponto, fala-se da reportagem de que acima referi. O Cardeal mostra-se crítico em relação à visão da sexualidade que têm as pessoas homossexuais entrevistadas. Não desmente, porém, o conhecimento e autorização da cedência dos espaços eclesiais nem se refere às declarações dos sacerdotes.

2. Quem é o padre Domenico Pezzini? É um dissidente que contesta a Doutrina da Igreja defendendo, em vários dos seus livros, que ela aceite os actos homossexuais como bons e advogando esses comportamentos. Não admira que fosse uma estrela para os activistas homossexuais, infiltrados na Igreja, em Itália.

O padre Pezzini foi preso na Segunda-feira por violência e abuso sexual de menores. Além disso, a polícia encontrou em sua casa uma grande quantidade de pornografia infantil.

Nuno Serras Pereira

27. 05. 2010

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[1] " ... Cristo, o Salvador, concedeu a Israel conversão e perdão dos pecados (v. 31) – no texto grego, o termo é metanoia – deu penitência e perdão dos pecados. Para mim, esta é uma observação muito importante: a penitência é uma graça. Há uma tendência na exegese, que diz: Jesus na Galileia teria anunciado uma graça sem condições, absolutamente incondicional (sublinhados meus), portanto também sem penitência, graça como tal, sem pré-condições humanas. mas esta é uma falsa interpretação da graça. A penitência é graça; é uma graça que nós reconheçamos o nosso pecado, é uma graça que saibamos que temos necessidade de renovação, de mudança, de uma transformação do nosso ser. Penitência, poder fazer penitência, é um dom da graça. E devo dizer que nós, cristãos, também nos últimos tempos, muitas vezes evitamos a palavra penitência porque nos parecia demasiado árdua. Agora, sob os ataques do mundo que nos falam dos nossos pecados, vemos que poder fazer penitência é uma graça. E vemos que é necessário fazer penitência, ou seja, reconhecer aquilo que está errado na nossa vida, abrir-se ao perdão, preparar-se para o perdão, deixar-se transformar. A dor da penitência, isto é, da purificação, da transformação, esta dor é graça, porque é renovação, é obra da misericórdia divina. E assim estas duas coisas que São Pedro diz – penitência e perdão – correspondem ao início da pregação de Jesus: metanoeite, ou seja, convertei-vos (cf. Mc 1, 15). Portanto, este é o ponto fundamental: a metanoia não é algo particular, que pareceria substituída pela graça, mas a metanoia é a vinda da graça que nos transforma." Bento XVI, Homilia na Missa com os membros da Pontifícia Comissão Bíblica, 15. 04. 2010

[2] Comentei, na altura, essa entrevista no texto intitulado “O grande lorpa” http://jesus-logos.blogspot.com/2010/04/o-grande-lorpa.html

Employment Nondiscrimination Act (ENDA) the Road: Homosexual Nondiscrimination Bill Must be Stopped Say Catholic Bishops

By Peter J. Smith

WASHINGTON, D.C., May 26, 2010 (LifeSiteNews.com) – The U.S. Catholic bishops have come out in full force against the federal Employment Nondiscrimination Act (ENDA). They say they can no longer stay neutral on a bill that they charge will lead to the Roe v. Wade of traditional marriage in the United States, and trample on the rights of employers and those speaking the truth about homosexuality.

In a letter sent to Congress on May 19, and obtained by the Jesuit-run publication America, representatives of the Catholic bishops said that their concerns over the current forms of ENDA making their way through the U.S. House of Representatives (H.R. 3017) and the U.S. Senate (S. 1584) are so serious that “we cannot maintain the position of neutrality we held in 2007.”

The letter, sent by Archbishop Joseph Kurtz of Louisville, Chairman of the Ad Hoc Committee for the Defense of Marriage, Bishop William Murphy, Chairman of the Committee on Domestic Justice and Human Development, and Archbishop Donald Wuerl of Washington, D.C., Chairman of the Committee on Doctrine, stated that the U.S. Conference of Catholic Bishops (USCCB) was opposing ENDA. They said the law would pose serious danger to marriage, religious liberty, privacy, the right to speak the truth about homosexuality in the public square, the rights of employers to act “consistent with that truth,” and the right of individuals to associate freely as guaranteed by the First Amendment of the U.S. Constitution.

The bishops indicated that they have wised up to the fact that state ENDA laws have been integral – even a necessary last step – for state courts to have a legal basis for imposing a constitutional right to same-sex “marriage.” A federal ENDA would serve to lay the necessary groundwork for building a federal constitutional right to same-sex “marriage,” imposed nationwide, they warned.

“These rulings also reflect a legal strategy that gay rights advocates have repeatedly and publicly explained in scholarly articles and other media — first, secure the passage of sexual orientation antidiscrimination laws, such as ENDA, and then invoke the principle embedded within those laws as a basis for same-sex ‘marriage,’” the letter states.

“If this strategy were to succeed, it would represent a legal and moral disaster comparable in many ways to Roe v. Wade. As leaders of the Catholic Church, we have a moral obligation to oppose any law that would clearly contribute to this outcome,” they declared.

“In contrast to sexual conduct within marriage between one man and one woman — which does serve both the good of each married person and the good of society — heterosexual and homosexual conduct outside of marriage has no claim to special protection by the state.”

They also said that giving the Church a religious exemption would not allay their opposition to the bill. They noted that applying Title VII prohibitions on religious discrimination does not extend to all religious employers, and that they have been taught by “recent experience” that even covered institutions like the Church “may face government retaliation.”

They highlighted the the rights of non-religious employers as well, adding that the “bill also lacks an exemption for a ‘bona fide occupational qualification’ (BFOQ), for those cases where it is neither unjust nor inappropriate to consider an applicant’s sexual inclination.”

They also stressed strongly that ENDA would jeopardize the right to teach the truth about homosexuality – and for employers to act in accord with that truth – with the “threat of government sanction.”

“We recognize that no one should be an object of scorn, hatred, or violence for any reason, including sexual inclination,” said the church leaders. This right comes from the revelation that all persons are “created in the image and likeness of God” and therefore “possess an innate human dignity that must be acknowledged and respected, by other persons and by law,” they said.

The letter concluded by saying that the USCCB could never support ENDA, but was open to “further discussion” on developing legislation protecting those with homosexual inclinations “from unjust discrimination, without protecting homosexual conduct.”

See related coverage by LifeSiteNews.com:

New Documentary on Homosexual Threat to Religious Freedom
http://www.lifesitenews.com/ldn/2010/may/10051313.html

Obama Appoints Lesbian Activist to EEOC Board
http://www.lifesitenews.com/ldn/2010/mar/10032914.html

Obama Assures Homosexualist Leaders He's a "Champion" of Their Cause at Private White House Reception
http://www.lifesitenews.com/ldn/2009/jun/09063007.html

Homosexualist Activist Priest Arrested for Sex Abuse of Teen in Milan

By Hilary White

MILAN, May 26, 2010 (LifeSiteNews.com) – One of Italy’s most outspokenly dissenting Catholic priests, Domenico Pezzini, has been arrested for abuse of a male teenaged victim. Pezzini, a 73 year-old priest of the diocese of Lodi, was arrested Monday in Milan. Police also revealed that a large quantity of child pornography had been found after a search of Pezzini’s residence.

In keeping with mainstream media coverage of clerical sex abuse, the Italian media is presenting the abuse as a case of “pedophilia,” or the abuse of a child. Nevertheless, police have made it public that the victim was not a child, but a minor adolescent, between 13 and 16, at the time of the alleged abuse, over three years ago.

Aurelio Mancuso, former president of Arcigay, the country’s leading homosexualist activist group, was quoted saying, “In these hours is strong discouragement among many gay Catholics who have known Don Mario Pezzini personally or through his actions and deeds.

“We have always enjoyed a journey of pastoral listening and defending the dignity of homosexuals within the Catholic Church. All this cannot overshadow the accusations made against the prelate that seem to be precise and detailed: violence and sexual abuse of children.”

Pezzini, a professor of English linguistics at the University of Verona, is a celebrity for homosexualist activists in the Catholic Church in Italy. In the 1980s, he helped to found a group, called The Source, similar to that of New Ways Ministry in the U.S., that attempted to pressure the Catholic Church to accept homosexual activity. He has authored several books defending homosexual behavior.

In 1999, Pezzini wrote an article attacking then-Cardinal Ratzinger after the latter had disciplined Sr. Jeannine Gramick and Fr. Robert Nugent, the founders of New Ways Ministry, who had refused to assent to Catholic teaching on sexuality.

Ainda as Presidenciais

Escrevi há dias um pequeno texto (escrevo sempre por tópicos[1]) no qual afirmava que se não fora Sacerdote faria campanha pela abstenção nas próximas eleições presidenciais[2]. Mas como não sou político nem filho de político[3] todo o meu empenho é pela conversão dos corações, pela salvação das almas. Todavia, pelos ecos recebidos, verifiquei a necessidade de esclarecer um ou outro ponto.

Um dos que me chegou por vias diversas foi o da afirmação de que em vez da abstenção deveria apelar ao voto em branco, uma vez que este significaria, por um lado, a adesão ao sistema democrático e, por outro, a demonstração de que o eleitor não se reconhecia em nenhum dos candidatos e, por isso, os repudiava desse modo. A verdade, porém, é que, absurdamente, em Portugal, o voto branco não conta como tal mas é equivalente ao voto nulo[4].

Outro ponto é o de que o católico tem a obrigação moral de se empenhar e participar na política de modo a fermentá-la com o Evangelho. O voto, adianta-se, é um dever grave do cristão, de modo que a abstenção, consciente e livre, seria uma falta ou pecado grave. Ora quanto a esta objecção podemos concordar inteiramente com a primeira parte mas, no que se refere à segunda devemos dizer que ela é condicional.

Para inteira inteligência dessa condicionalidade importa ter em conta vários factores. O primeiro é o de que actualmente se vive em Portugal num regime democrático meramente formal. Substancialmente vivemos num estado tirano, num regímen totalitário[5]. Ora o voto pode, em determinadas circunstâncias, contribuir para a consolidação e mesmo promoção dessas realidades gravemente injustas.

Se atentarmos bem ao que se tem passado ao longo destas últimas décadas teremos de concluir que o católico bem formado e todo o homem de boa vontade têm progressivamente visto o seu horizonte de escolha lícita ser de tal modo reduzido que chegámos ao ponto de nos quererem obrigar a optar somente entre coisas ilícitas e injustas. Embora possamos não concordar com a identidade não há dúvida de que as eleições presidenciais, que se aproximam, têm muitas semelhanças com o dilema nazi. Aqui chamo dilema nazi àquela escolha a que quiseram obrigar um pai de família. Consta, de facto, que durante a segunda grande guerra um oficial nazi dirigindo-se a um pai, diante das suas duas filhas, lhe teria dito: ou matas uma delas ou eu mato as duas. Evidentemente que a crueldade diabólica desta proposta só poderia ter como resposta de amor verdadeiro a recusa do pai em assassinar qualquer uma delas. Outra opção traduzir-se-ia numa cumplicidade e numa promoção objectivas da mentalidade nazi, e numa transformação do desventurado num filicida. Que nunca é lícito escolher o mal é um princípio absoluto da moral natural, confirmado pela Revelação sobrenatural de Deus.

É verdade que haveria grande conveniência em conseguirmos um candidato, intransigente em relação aos princípios não negociáveis, que aproveitasse a campanha eleitoral para esclarecer e formar as consciências com a verdade que por sê-lo é universal e encontra eco em todos os corações. Será possível, creio eu, e mesmo provável que isso possa vir a acontecer. No entanto, como não se antevê a possibilidade de um candidato com peso político suficiente para derrotar aqueles cujas propostas ou/e actuações representam o Inimigo do género humano, melhor seria que não fosse a votos mas que apelasse à abstenção maciça. E isto porque o seu revés (mesmo que conseguisse algumas dezenas de milhares de votos) seria interpretado como uma derrota clamorosa, como um soçobro, das forças favoráveis à vida e à família. Ora parece-me mais fácil persuadir as pessoas à abstenção do que mobilizá-las para uma candidatura alternativa ao candidato “católico e grande amigo” do Papa.

Uma abstenção maciça, isto é, uma abstenção que excedesse significativamente a habitual enfraqueceria politicamente a legitimidade formal do presidente, representaria um sério aviso para os partidos que o tivessem apoiado e constituiria uma advertência para os políticos que intitulando-se católicos[6] se têm entretido em trair a sua Fé, seduzindo os simples.

Momentos excepcionais exigem comportamentos e medidas excepcionais.

Estas reflexões, já se sabe, são de um franciscano miserável e idiota. Os fiéis leigos são chamados a agirem de acordo com a sua consciência, bem formada, quer dizer concorde com a Verdade interpretada autenticamente pelo Magistério da Igreja. Isto significa que serão eles e não os Pastores (se cumpriram o seu dever) a responder, a prestar contas, perante Deus no Juízo particular e no final.

Nuno Serras Pereira

25. 05. 2010

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[1] Escrever, para quem ainda não o saiba, para mim é um tormento. Não o faço por vocação mas por ser compelido a tal. Sendo um suplício tão grande julgo que se compreenderá facilmente porque não desenvolvo nem explicito miudamente as ideias e conceitos. Geralmente parto do princípio que quem me lê tem já a informação suficiente para contextualizar o que escrevo. Muita dessa informação é enviada por mim mesmo por outras vias para os meus leitores.

[2] Nuno Serras Pereira, As Presidenciais, 18. 05. 2010. In http://jesus-logos.blogspot.com/2010/05/cavaco-e-as-presidenciais.html

[3] De facto o meu pai, segundo a carne, foi político mas aqui refiro-me à paternidade espiritual de S. Francisco de Assis.

[4] É certo que nos resultados eleitorais se distingue entre brancos e nulos, mas ambos não contam como votos expressos.

[5] É isto que nos ensinam, por exemplo, as Encíclicas O Esplendor da Verdade e O Evangelho da Vida do Papa João Paulo II.

[6] Vide Nuno Serras Pereira, Dos políticos católicos, livrai-nos Senhor, 25. 05., 2009. In http://jesus-logos.blogspot.com/search?q=ladainha

Carta sem resposta -Un misionero escribe al New York Times para relatar estremecedoras historias que «no son noticia»

El misionero salesiano uruguayo Martín Lasarte, un misionero que vive hace 20 años en Angola, se define a sí mismo en una carta al The New York Times como «un simple sacerdote católico» que se siente «feliz y orgulloso» de su vocación.

El diario norteamericano, que lideró la campaña contra la Igelsia y el Papa por los casos de pedofilia cometidos por algunos clérigos, aún no ha respondido, informa Zenit.

En ella Lasarte explica la labor silenciosa en favor de los más desfavorecidos de la mayoría de los sacerdotes de la Iglesia católica que, sin embargo, «no es noticia».

La carta

«Me da un grande dolor que personas que deberían de ser señales del amor de Dios hayan sido un puñal en la vida de inocentes. No hay palabra que justifique tales actos. No hay duda que la Iglesia no puede estar sino del lado de los débiles, de los más indefensos. Por lo tanto todas las medidas que sean tomadas para la protección, prevención de la dignidad de los niños serán siempre una prioridad absoluta», afirma el misionero en su carta.

No es noticia...transportar niños por campos minados
Sin embargo, añade el misionero, «es curiosa la poca noticia y desinterés por miles y miles de sacerdotes que se consuman por millones de niños, por los adolescentes y los más desfavorecidos en los cuatro ángulos del mundo».

«Pienso que a vuestro medio de información no le interese que yo haya tenido que transportar por caminos minados en 2002 a muchos niños desnutridos desde Cangumbe a Lwena (Angola) pues ni el gobierno se disponía y las ONG no estaban autorizadas; que haya tenido que enterrar decenas de pequeños fallecidos entre los desplazados de guerra y retornados; que le hayamos salvado la vida a miles de personas en Moxico mediante el único puesto médico en 90.000 kilómetros cuadrados, así como con la distribución de alimentos y semillas; que hayamos dado la oportunidad de educación en estos 10 años y escuelas a más de 110.000 niños...», subraya. Ler mais

From Lesbian Atheist to Stay-at-Home Mother of Six: Quebec Journalist Tells Her Story

Brigitte Bedard captivates 200-strong crowd with her conversion story at May 15 Quebec Life Coalition Conference in Quebec City

By Georges Buscemi

May 20, 2010 (LifeSiteNews.com) - “I was an atheist for as long as I could remember” recalled Brigitte Bedard, a young-looking 41-year-old journalist and stay at home mother of six with cropped tousled brown hair and stylish thick-framed glasses. She was addressing a crowd of 200 participants at the Quebec Life Coalition pro-life conference on May 15 in Quebec City.

While Bedard is less well known than the conference’s keynote speaker – Cardinal Marc Ouellet – whose staunchly pro-life statements made later that afternoon were seized on by the anti-life Quebec media, she might be the speaker who most touched hearts that Saturday afternoon.

Ms. Bedard grew up at a time when Quebec society was undergoing what historians call the “Quiet Revolution,” a period of time from the early-sixties to the mid seventies when Quebec society shed its Christian heritage and adopted secular values. “I was born in 1968 — talk about bad luck” she joked.

Bedard had a typical childhood in a non-religious household, and went to the notoriously leftist Université du Québec à Montréal, where she studied literature, eventually graduating with an MA. “I filled my mind with all the radical feminist literature — I drank it all up” she said.

She began a series of heterosexual relationships, which all ended badly. “Prodded along by what I was reading, I began thinking that since all my heterosexual relationships were failures, that I might be a lesbian.” And in fact she dove into the lesbian lifestyle, and admitted that she revelled in it for quite some time. “It was actually a very good time, in a way, being with a big gang of girls, tearing up the town, chain-smoking like there was no tomorrow. I was also very sexually active.”

Despite the fun and the excitement of the lifestyle, she felt broken, she recalls. “I was a mental wreck. I just felt that I was spinning out of control, that I was keeping appearances but I was miserable inside.” Things came to a head when, inexplicably, she broke into tears one night at 3 am and began shouting in her empty apartment in a trendy district of Montreal, imploring God to “take her away.” “Here I was, a militant feminist lesbian atheist lying on my apartment floor crying my head off imploring God. I wasn’t in my right mind, but I was desperate for help.”

She began seeking help, meandering in and out of countless 12-step type programs, in the hopes of finding some kind of solution for her anxiety and “messed-up life.” To make matters worse, she had just quit smoking: “I was suddenly forced to face life in the raw, without any protection or buffer.”

At wit’s end, she recounted how someone she knew talked about visiting “the monks” at the famous Saint-Benoît Abbey in Saint-Benoît-du-Lac, Quebec. The idea, as bizarre as it seemed to her, intrigued her, and she went, but not without reservations. “I went to the monastery armed with all the contempt and hatred for the patriarchal Church that I had stored up from years of radical feminist studies. For radical feminists the Church is basically enemy #1.”

She entered the convent and was assigned a room and a monk with whom she could converse twice a day. “For three days in a row, two hours a day, I badgered, screamed at, practically foamed at the mouth in the face of this monk, dredging up basically every insult, cliché, dirty thing that I could think of, or invent about Christianity. I was so mad, so hurt and angry, and I was dishing it all out to this monk, who never said a word the whole time, but instead just looked at me, nodding his head.”

Then, at the end of those three days, something happened that changed her life forever. “It was the third day, the sixth hour of screaming. We were about to wrap up yet again. I was basically done screaming, there was a pause, and then the monk looked up and said to me “you have no idea, absolutely no idea how much God loves you; He made you out of nothing, he knows you, you have no idea how much he loves you, His daughter. So don’t feel ashamed, let it all go. Give it up, give it all up, give your life up to Him … He loves you so much.”

Those simple words at that crucial time “absolutely floored her” she recalled. From that moment on, her life had utterly changed. “I am His daughter, there are no two ways about it, and I can’t explain it.” She admits she is at pains to explain exactly what it was that caused her conversion: “I just say that God floored me, staggered me; I didn’t convert myself, he brought me to Him.”

She now works as an independent journalist and happily married stay-at-home mother of six. Life for her now is not all peaches and cream, however. “When I need quiet, there’s nothing I can do except for one thing: get up at 4 am. Which I do, pretty often, just to get some peace.” Remarking on the differences between her life now and in her lesbian days, she quipped: “Living with a man is definitely a pain, but living with a woman all the time was a living hell.”

Brigitte Bedard, who writes for the Nouvel Informateur Catholique, was one of four conference participants (plus keynote speaker Cardinal Marc Ouellet) at the annual Quebec Life Coalition conference at Quebec City on May 15. Video recordings of the talks (in original French, or dubbed in English) are available through Quebec Life Coalition.

Alarmante testimonio de mujer criada por pareja de mismos sexos

MADRID, 12 Oct. 06 / 04:31 pm (ACI)

Una mujer canadiense que fue criada en un hogar homosexual se dedica ahora a asistir a otras personas que atraviesan por la misma situación y a pedir a los gobiernos del mundo que protejan el matrimonio entre hombre y mujer.

Según informa ForumLibertas.org, Dawn Stefanowicz vive en Ontario, Canadá, con su esposo de toda la vida y sus dos hijos, a los que ha educado en casa. Actualmente prepara su autobiografía y desarrolla un ministerio especial desde el sitio web (en inglés) www.dawnstefanowicz.com : Brinda ayuda a otras personas que como ella crecieron a cargo de un padre homosexual y fueron expuestos a este estilo de vida.

Stefanowicz explica en el sitio web "cómo en su infancia estuvo expuesta a intercambios de parejas gays, playas nudistas y la falta de afirmación en su feminidad, cómo le hirió el estilo de vida en el que creció, y ofrece ayuda, consejo e información para otras personas que han crecido heridas en un entorno de ‘familia’ gay, un estilo de ‘familia’ que ella no desea para nadie y que cree que las leyes no deberían apoyar".

Su testimonio

En su relato, Stefanowicz explica que debido a una enfermedad grave de su madre debió quedar al cuidado de su padre homosexual cuando aún era una niña. "Estuve expuesta a un alto riesgo de enfermedades de transmisión sexual debido al abuso sexual, a los comportamientos de alto riesgo de mi padre y a numerosas parejas", relata.

"Incluso cuando mi padre estaba en lo que parecían relaciones monógamas, continuaba haciendo ‘cruising’ buscando sexo anónimo. Llegué a preocuparme profundamente, a amar y entender con compasión a mi padre. Compartía conmigo lo que lamentaba de la vida. Desgraciadamente, siendo niño unos adultos abusaron sexual y físicamente de él. Debido a esto, vivió con depresión, problemas de control, estallidos de rabia, tendencias suicidas y compulsión sexual. Intentaba satisfacer su necesidad por el afecto de su padre, por su afirmación y atención, con relaciones promiscuas y transitorias. Las (ex) parejas de mi padre, con los que traté y llegué a apreciar con sentimientos profundos, vieron sus vidas drásticamente acortadas por el SIDA y el suicidio. Tristemente, mi padre murió de SIDA en 1991", recuerda.

Según Stefanowicz las "experiencias personales, profesionales y sociales con mi padre no me enseñaron el respeto por la moralidad, la autoridad, el matrimonio o el amor paterno. Me sentía temerosamente acallada porque mi padre no me permitía hablar de él, sus compañeros de casa, su estilo de vida y sus encuentros en esa subcultura. Mientras viví en casa, tuve que vivir según sus reglas".

"Sí, amaba a mi padre. Pero me sentía abandonada y despreciada porque mi padre me dejaba a menudo para estar varios días con sus compañeros. Sus parejas realmente no se interesaban por mí. Fui dañada por el maltrato doméstico homosexual, las tentativas sexuales con menores y la pérdida de parejas sexuales como si las personas fueran sólo cosas para usar. Busqué consuelo, busqué el amor de mi padre en diversos novios a partir de los 12 años", sostiene.

Stefanowicz recuerda que "desde corta edad, se me expuso a charlas sexualmente explícitas, estilos de vida hedonistas, subculturas GLBT y lugares de vacaciones gay. El sexo me parecía gratuito cuando era niña. Se me expuso a manifestaciones de sexualidad de todo tipo incluyendo sexo en casas de baño, travestismo, sodomía, pornografía, nudismo gay, lesbianismo, bisexualidad, voyeurismo y exhibicionismo. Se aludía al sadomasoquismo y se mostraban algunos aspectos. Las drogas y el alcohol a menudo contribuían a bajar las inhibiciones en las relaciones de mi padre".

"Mi padre apreciaba el vestir unisex, los aspectos de género-neutro, y el intercambio de ropas cuando yo tenía 8 años. Yo no veía el valor de las diferencias biológicamente complementarias entre hombre y mujer. Ni pensaba acerca del matrimonio. Hice votos de no tener nunca hijos, porque no crecí en un ambiente de hogar seguro, sacrificial, centrado en los niños", señala.

Las consecuencias

"Más de dos décadas de exposición directa a estas experiencias estresantes me causaron inseguridad, depresión, pensamientos suicidas, miedo, ansiedad, baja autoestima, insomnio y confusión sexual. Mi conciencia y mi inocencia fueron seriamente dañados. Fui testigo de que todos los otros miembros de la familia también sufrían", sostiene Stefanowicz.

Ella asegura que sólo después de haber tomado las decisiones más importantes de su vida, empezó a darse cuenta de cómo la había afectado crecer en ese ambiente.

"Mi sanación implicó mirar de frente la realidad, aceptar las consecuencias a largo plazo y ofrecer perdón. ¿Podéis imaginar ser forzados a aceptar relaciones inestables y prácticas sexuales diversas desde corta edad y cómo afectó a mi desarrollo?. Desgraciadamente, hasta que mi padre, sus parejas sexuales y mi madre murieron, no pude hablar públicamente de mis experiencias", explica.

"Al final, los niños serán las víctimas reales y los perdedores del matrimonio legal del mismo sexo. ¿Qué esperanza puedo ofrecer a niños inocentes sin voz? Gobiernos y jueces deben defender el matrimonio entre hombre y mujer y excluir todos los otros, por el bien de nuestros niños", concluye.