En una entrevista publicada por Planeta en el libro "Nadar contra corriente", el entonces cardenal Ratzinger calificaba como "muy peligroso" que se enseñe meditación trascendental y yoga en las iglesias católicas y comunidades religiosas. "El riesgo es que el yoga pueda transformarse en un método autónomo de 'redención', desprovisto de un verdadero encuentro entre Dios y el hombre", afirmaba.
La entrevista, que fue publicada por la revista "30Giorni" en 1999, aborda temas como la magia, el espiritismo, el yoga y las fuerzas ocultas. El Papa declaró entonces: "Es verdad que también en la oración y en la meditación cristiana la posición del cuerpo tiene su importancia y significa una conducta interior que se expresa en la liturgia. Pero en el yoga los movimientos del cuerpo tienen una implicación diferente con respecto a la relación con Dios, que no es la de la liturgia cristiana. Hay que tener la máxima prudencia, ya que detrás de estos elementos corporales se esconde una concepción del ser como tal, de la relación entre cuerpo y alma, entre hombre, mundo y Dios".
El entonces prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe señalaba también que "el mantra es una oración que no está dirigida a Dios, sino a otras divinidades que son ídolos".
Sobre la meditación trascendental, el Papa dijo que es una traición con respecto a la fe cristiana, "porque el Dios Trascendente, la persona que me ha llamado y que me ama, viene deformado en una dimensión trascendental del ser". Y añadía: "El camino de la meditación trascendental tiene la capacidad de introducirte dentro de tu identidad, algo exactamente opuesto a la visión cristiana, que reconoce una unión de entidades. Cristo se ha identificado con nosotros y así nos introduce en su Cuerpo, pero es una identificación diferente, obrada en el amor, en la cual permanece siempre una identidad personal distinta; mientras que la meditación trascendental comporta sumergirse, dejarse 'deshacer' en la identidad del ser supremo".
El precio de estas prácticas es, según el Santo Padre, "perder la fe, la perversión de la relación hombre-Dios y una profunda desorientación del ser humano".
El libro de Planeta, que acaba de ser publicado, incluye entrevistas a Benedicto XVI –la mayor parte realizadas antes de ser elegido Papa – publicadas en medios como "La Reppublica", "Le Figaro" o "Frankfurter Allgemeine Zeitung", muchas de ellas inéditas en castellano. El Papa responde sobre temas como el terrorismo islamista, la moral sexual, los nuevos movimientos católicos, China, Europa, los jóvenes, los problemas de la Iglesia o las relaciones entre el catolicismo y el islam o el mundo judío.