BARCELONA, 10 May. 13 / 11:42 am (ACI/Europa Press).-
Los
hospitales de Sant Joan de Déu de Esplugues de Llobregat y Clínic de
Barcelona (España) han operado por primera vez en el mundo con éxito a
un feto de 21 semanas que tenía una obstrucción en la laringe, una
patología que en la mayoría de las ocasiones acaba con la muerte antes
de nacer.
La operación, que tuvo lugar el 14 de marzo de 2012, se ha dado a
conocer este jueves, diez meses después del nacimiento del niño, llamado
Gonzalo, que lleva una vida normal y sin secuelas.
La paciente fue enviada a Barcelona desde el Hospital de Cartagena,
donde detectaron que el feto tenía los pulmones muy dilatados y ello
comprimía el corazón y podía derivar en un fallo cardiaco.
"Dábamos todo por perdido, nos dijeron en Cartagena que teníamos que
abortar, pero que antes fuéramos a Barcelona", ha relatado Francisco, el
padre del bebé, ante los medios de comunicación.
En Barcelona, los médicos confirmaron que la laringe del feto estaba
totalmente obstruida, lo que impedía que los pulmones expulsaran sus
secreciones por la tráquea, y ofrecieron a los padres una intervención
para desobstruir la laringe, algo que se había intentado tres veces en
el mundo sin éxito.
El equipo de cirugía fetal de Sant Joan de Déu y del Clínic operó el
feto en el vientre de la madre, introduciendo un fetoscopio --un
endoscopio especial de sólo 3 milímetros de grosor-- que confirmó que la
laringe estaba obstruida por una membrana que, posteriormente,
perforaron y eliminaron.
El jefe del servicio de cirugía fetal, Eduard Gratacós, ha explicado que
"la operación se estuvo preparando durante una hora y media para
inmovilizar al feto y colocarlo en la posición idónea, y la cirugía en
sí duró tan sólo 22 minutos".
Esta es la primera vez en el mundo que se desobstruye una laringe en un
feto en el vientre materno, una operación "que es muy compleja ya que es
difícil llegar a la tráquea sin romper nada", ha dicho Gratacós.
La obstrucción laríngea es una malformación extraña que provoca la
muerte a la mayoría de fetos que la sufren, y los que sobreviven acaban
falleciendo o con secuelas muy graves, ya que el tejido pulmonar queda
gravemente dañado.